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Buenas noticias Samsara

Por Samsara Escuela de Yoga 14 ene, 2021
¡Oh, Agua sagrada!, me dejo limpiar por ti, por el vaho de tu aliento que acaricia mi piel. Líbrame de todos los pensamientos de separatividad y de lucha, de crítica y de duda que me agitan. Pon luz y sabiduría en mi corazón. Purifica mi alma con la frescura de tu abrazo, para que yo pueda transmitir libertad, para que mis hermanos descubran y sean, lo que verdaderamente son. Mi cuerpo te necesita pura lo mismo por dentro que por fuera. Que gracias a tu vibración, podamos realizar todos, la armonía, la pureza y la alegría. Gracias, cuando te manifiestas como lluvia. Porque das vida a los campos, a los ríos, a los lagos y al mar. Porque limpias las ciudades y pacificas nuestra mente. Gracias, cuando te expresas como nieve. Porque purificas la tierra y abres nuestro corazón. Porque nos enseñas cómo debe ser el color de nuestra alma. Gracias por estar en el mar guardando inmensas riquezas. Y porque ayudas a que nuestra mente y corazón se expandan. Gracias, cuando te conviertes en hielo. Porque nos ayudas a conservar la vida y a recogernos en el templo de nuestro yo más íntimo. Gracias por vivir en nuestras entrañas, en los sutiles fluidos de nuestro cuerpo que nos mantienen con vida. Gracias, sobre todo, cuando te conviertes en lágrimas. Porque nos ayudas a comprender el dolor, experimentar el sentimiento y expresar la alegría cuando se conmueve nuestra alma. Gracias, amada Agua, porque eres la vida. Soma Del libro: "Invocación, el Yoga del Alma" de Soma - Xabier Satrustegi (Escuela de Yoga Witryh) · Un libro muy útil si queremos utilizar la fuerza del pensamiento correctamente, para nuestra evolución humana y espiritual. · 85 invocaciones con más de 100 fotos a todo color de alumnos y profesores meditando y practicando en la montaña de Witryh. Es el producto de 30 años de investigación, práctica y meditación sobre el poder de la invocación. · Este libro contribuye a que tus pensamientos eleven su vibración, los sentimientos despierten la devoción y tu alma aprenda el significado de meditación. · La invocación es el lenguaje del alma que aspira a fundirse con el Eterno Invisible y es el mayor poder que posee el ser humano. · En este libro se explica cómo utilizar la invocación, el decreto (Sankalpa) y la oración, de forma adecuada, eficaz y directa. · Esta obra es un manual que te aporta la fórmula y 85 ejemplos para que vayas practicando. · La invocación te permite adquirir el autodominio necesario para armonizar tu vida y para que tu alma sea el conductor de tu existencia. Descripción: Es un libro de tapa dura, de casi 300 páginas, a todo color y con anillas por dentro. Precio del libro: 38 euros Puedes comprarlo en cualquier librería, en la Escuela o a través del teléfono 678463689
Por Samsara Escuela de Yoga 04 oct, 2020
Y entonces un hombre dijo: «Háblanos del conocimiento de uno mismo». Y él respondió: «En silencio, vuestros corazones saben los secretos de los días y de las noches. Mas vuestros oídos ansían escuchar el eco del conocimiento de vuestro corazón. Quisierais saber en palabras lo que siempre supisteis en pensamiento. Quisierais tocar con vuestros dedos el desnudo cuerpo de vuestros sueños. Y es bueno que así sea. El recóndito manantial de vuestra alma necesita brotar y correr murmurando hacia el mar. Y el tesoro de vuestra profundidad infinita se revelaría entonces a vuestros ojos. Mas no tratéis de pesar en balanzas vuestro tesoro desconocido. Ni exploréis las profundidades de vuestro conocimiento con cayados ni sondas. Porque el yo es un mar infinito, inconmensurable. No digáis: “He hallado la verdad”, sino: “He hallado una verdad”. No digáis: “He encontrado la senda del alma”. Decid más bien. “He encontrado al alma caminando por mi senda”. Porque el alma camina por todas las sendas. El alma no va en línea recta, ni crece como una caña. El alma se despliega como un loto de innumerables pétalos». Del libro "El Profeta" de Kahlil Gibran
Por Samsara Escuela de Yoga 27 sept, 2020
Entonces fue una mujer la que pidió: «Háblanos de la alegría y la tristeza». Y él respondió: «Vuestra alegría es vuestra tristeza sin máscara. Y el mismo pozo del que mana vuestra risa, ha estado con frecuencia lleno de vuestras lágrimas. ¿Cómo podría ser de otra manera? Cuanto más profundo ahonde el pesar en vuestro corazón, más alegría podrá contener. La copa que contiene vuestro vino, ¿no es la misma que estuvo quemándose en el horno del alfarero? Y el laúd que serena vuestro ánimo, ¿no es la misma madera que fue excavada con cuchillos? Cuando tembléis de alegría, mirad en lo hondo de vuestro corazón y comprobaréis entonces que sólo lo que os ha dado tristeza os está devolviendo alegría. Cuando tembléis de tristeza, mirad nuevamente en vuestro corazón, y comprobaréis que estáis llorando por lo que antes fuera vuestra alegría. Algunos de vosotros soléis decir: “La alegría es superior a la tristeza”, y otros: “No, la tristeza es superior”. Mas yo os digo que ambas son inseparables. Juntas llegan, y cuando una se sienta a vuestro lado en la mesa, la otra espera durmiendo en vuestra cama. Realmente estáis como el fiel de la balanza entre vuestra alegría y vuestra tristeza. Sólo cuando estáis vacíos vuestro peso está quieto y en equilibrio. Cuando el guardián del tesoro os llame para pesar su oro y su plata, vuestra alegría o vuestra tristeza harán oscilar a un lado o a otro el fiel de la balanza». Del libro "El Profeta" de Kahlil Gibran
Por Samsara Escuela de Yoga 20 sept, 2020
Se adelantó un albañil y dijo: «Háblanos de las casas». Y él respondió: «Levantad con vuestra imaginación una enramada en la selva, mejor que construir una casa dentro de las murallas de la ciudad. Porque aunque en vuestro ocaso sintáis deseos de hogar, de igual manera ese otro yo vagabundo que en vosotros habita anhelará siempre la lejanía y la soledad. »Vuestro cuerpo es vuestra mayor morada. Crece bajo el sol y duerme en la quietud de la noche. Y sueña. ¿No sueña acaso vuestra morada? ¿No abandona soñando la ciudad para buscar el bosquecillo o la cima de la colina? ¡Ay, si yo pudiera juntar vuestras moradas en mi mano y, como hace el sembrador, desparramarlas por bosques y praderas! Querría que los valles fueran vuestras avenidas, y los verdes caminos vuestras callejuelas, para que pudierais buscaros unos a otros por los viñedos y luego volvierais con la fragancia de la tierra prendida a vuestras ropas. Pero aún no es la hora de que esto suceda. En su miedo vuestros antepasados os pusieron demasiado cerca unos de otros. Ese miedo todavía ha de durar. Durante cierto tiempo aún las murallas de vuestra ciudad separarán vuestros hogares de vuestros campos. Y decidme, pueblo de Orfalís, ¿qué tenéis en esas casas? ¿Qué guardáis tras puertas y candados? ¿Tenéis paz, el ánimo sereno que revela vuestro poder? ¿Tenéis recuerdos que como lucientes arcos unen las cimas de la mente? ¿Tenéis la belleza, que lleva el corazón desde las casas hechas en madera y piedra hasta la montaña sagrada? Decidme: ¿tenéis eso en vuestras casas? ¿O solamente comodidades, y ansia de comodidad que a escondidas penetra en la casa como advenedizo y luego se convierte en invitado y finalmente en amo y señor? Y ¡ay!, llega a ser el domador, y con látigo y garfio hace marionetas de vuestros mayores deseos. Sus manos son de seda, mas su corazón de hierro. Arrulla vuestro sueño, mas sólo para colocarse junto a vuestro lecho y escarnecer la dignidad de la carne. Se burla de vuestros sentidos para tirarlos luego en el cardal como si fueran frágiles barquillas. En verdad os digo que la concupiscencia de comodidad mata la pasión del alma, y luego acompaña entre muecas y risas el funeral. Mas vosotros, criaturas del espacio, vosotros, los inquietos en el descanso, no seréis atrapados ni domados. Vuestra casa no será ancla, sino mástil. No será la cinta brillante que cubre la herida, sino el párpado que protege la pupila. No plegaréis las alas para cruzar las puertas, ni inclinaréis vuestra cabeza para no golpearla contra el techo, ni temeréis respirar por miedo a que las paredes se agrieten y derrumben. No habitaréis tumbas hechas por los muertos para los vivos. Y aunque vuestra casa sea magnífica y espléndida, no aprisionará vuestro secreto ni encerrará vuestros anhelos. Porque lo que en vosotros es infinito, habita en la casa del cielo, cuya puerta es la niebla de la mañana y cuyas ventanas son los cantos y los silencios de la noche». Del libro "El Profeta" de Kahlil Gibran
Por Samsara Escuela de Yoga 13 sept, 2020
Y una mujer que estrechaba una criatura contra su seno se acercó y dijo: «Háblanos de los hijos». Y él respondió: «Vuestros hijos no son vuestros hijos. Son los hijos y las hijas del anhelo de la Vida, ansiosa por perpetuarse. Por medio de vosotros se conciben, mas no de vosotros. Y aunque estén a vuestro lado, no os pertenecen. Podéis darles vuestro amor; no vuestros pensamientos: porque ellos tienen sus propios pensamientos. Podéis albergar sus cuerpos; no sus almas: porque sus almas habitan en la casa del futuro, cerrada para vosotros, cerrada incluso para vuestros sueños. Podéis esforzaros por ser como ellos, mas no tratéis de hacerlos como vosotros: porque la vida no retrocede ni se detiene en el ayer. Sois el arco desde el que vuestros hijos son disparados como flechas vivientes hacia lo lejos. El Arquero es quien ve el blanco en el camino del infinito, y quien os doblega con Su poder para que Su flecha vaya rauda y lejos. Dejad que vuestra tensión en manos del arquero se moldee alegremente. Porque así como Él ama la flecha que vuela, así ama también el arco que se tensa». Del libro "El Profeta" de Kahlil Gibran
Por Samsara Escuela de Yoga 04 sept, 2020
Y Almitra dijo entonces: «Háblanos del amor». Y él alzó su cabeza, paseó su mirada entre la gente, y se produjo un silencio; entonces con voz fuerte, dijo: «Cuando el amor os llegue, seguidlo. Aunque sus senderos sean arduos y penosos. Y cuando os envuelva bajo sus alas, entregaos a él. Aunque la espada escondida entre sus plumas os hiera. Y cuando os hable creed en él. Aunque su voz sacuda vuestros sueños como hace el viento del norte, que arrasa los jardines. »Porque igual que el amor os regala, así os crucifica. Porque así como os hace prosperar, así os siega. Así como se remonta a lo más alto y acaricia vuestras ramas más delicadas que tiemblan al sol, así descenderá hasta vuestras raíces y las sacudirá desarraigándolas de tierra. »Como a mazorcas de maíz os recogerá. Os desgranará hasta dejaros desnudo. Os cernerá hasta libraros de vuestro pellejo. Os molerá hasta conseguir la indeleble blancura. Os amasará para que lo dócil y lo flexible brote de vuestra dureza. Y os destinará luego al fuego sagrado, para que podáis convertiros en el sagrado pan para el sagrado festín de Dios. Todo esto hará el amor con vosotros, para que conozcáis los secretos de vuestro propio corazón y así lleguéis a convertiros en un fragmento del corazón de la Vida. Mas si vuestro miedo os hace buscar sólo la paz y el placer del amor, entonces mejor sería que cubrierais vuestra desnudez y os alejarais de sus umbrales hacia un mundo sin estaciones, donde reiréis, pero no con toda vuestra risa; donde lloraréis, pero no con todas vuestras lágrimas. »El amor no da sino a sí mismo, y nada toma sino de sí mismo. El amor no posee ni quiere ser poseído. Porque el amor se basta en el amor. »Cuando améis, no digáis: “Dios está en mi corazón”, sino “Estoy en el corazón de Dios”. Y no creáis que podréis dirigir el curso del amor: será él quien, si os halla dignos, dirigirá vuestro curso. El amor no tiene más deseo que realizarse. Mas si amáis y no podéis evitar tener deseos, que vuestros deseos sean estos: Fluir y ser como el arroyo que murmura su melodía en la noche. Conocer el dolor de la excesiva ternura. Caer heridos por vuestro propio conocimiento del amor, y sangrar plena y alegremente. Despertar al alba con un corazón alado y dar gracias por otro día más de amor. Reposar al mediodía y meditar sobre el éxtasis amoroso. Volver al hogar cuando la tarde cae, volver agradecidos. Y dormir luego con una plegaria por el ser amado en vuestro corazón y con una canción de alabanza en vuestros labios». Del libro "El Profeta" de Kahlil Gibran
Por Samsara Escuela de Yoga 26 abr, 2020
Descansa tu mirada entre una respiración y otra, y deja que nazca de dentro de ti lo que puede ser expresado de infinitas formas. Aquí nace la expresión del canto.
Por Samsara Escuela de Yoga 14 abr, 2020
CLASES DE YOGA LUNES y MIÉRCOLES de 18.00 a 19.30 h SÁBADO de 8.30 a 10.00 h SESIONES DE MEDITACIÓN MARTES de 8.00 a 8.30 h JUEVES de 21.00 a 21.30 h *Para las personas que no pueden hacer las clases en los horarios propuestos, ofrecemos la sesión grabada para practicarla en otro horario. CONTACTA CON NOSOTROS, ¡¡TE ESPERAMOS!! TEL. 678463689
Por Samsara Escuela de Yoga 08 abr, 2020
Om bhur bhuvaha svaha Tat savitur varenyam Bhargo devasya dhimahi Dhiyo yonah prachodayat “Se dice que el Gayatri mantra es uno de los mantras más antiguos y poderosos que ha sido usado por miles de años. Purifica a la persona que lo canta así como a quién escucha creando una sensación de bienestar. Traducido significa: “Que todos los seres en la Tierra alcancen la iluminación”, pero como todos los mantras, el significado en Sánscrito no es tan importante como el efecto de la vibración de las palabras en los centros energéticos.” – Deva Premal Aum (or Om)- Dios/Brahma Bhoor – Energía pránica Bhuwah – Destructor del sufrimiento Swaha – Honrando la felicidad Tat – Dios o Espíritu Savitur – Sol brillante/ Dios (El nombre de un deva específico, Savitur) Varenyam – Grandioso Bhargo – Destructor de las malas acciones Devasya – Dios supremo Dheemahi – Sabiduría impartida/entendida Dhiyo – Inteligencia Yo – Quien Naha – Nosotros Prachodayat – Iluminación
Por Samsara Escuela de Yoga 05 abr, 2020
“Toda semilla tiene dos destinos: el primero es llenarse de coraje y valor para abrirse y dejar florecer todo el potencial que lleva dentro; y el otro, permanecer semilla hasta que decida realizar su sueño. El gran sueño guardado dentro de una semilla es encontrar el terreno adecuado para poder cumplir con su propio destino y si no lo encontrara, su sueño se aplazaría en el tiempo". Érase una vez una pequeña semilla que, al ser lanzada al suelo por las manos de su agricultor en plena luna nueva, no se supo si, por suerte o por azar, acabó cayendo en un terreno que no le permitía germinar. Las fases de la luna fueron pasando y la pequeña semilla que allí se encontraba iba viviendo sus días y noches de angustia y dolor por no haber encontrado el suelo fértil que tanto instintivamente deseaba. Al llegar el tiempo de la cosecha grandes bandadas de pájaros volaban por esta región en busca de alimentos. Al pasar por la inmensa plantación, iban bajando bandada a bandada para reponer las energías y poder seguir su viaje migratorio. Debido a la gran cantidad de alimento ningún pájaro había visto la pequeña semilla solitaria que allí se encontraba. Poco se podía esperar del destino de esta semilla hasta el momento que apareció un pájaro con los colores del arco iris, que venía del este sobrevolando la zona. Al ver la plantación desde del cielo, descendió posándose para reponer sus energías. Poca cosa se podía encontrar después de la invasión de las bandadas que por allí habían pasado con anterioridad. Por dicho motivo al buscar con su pico entre las piedras, encontró la pequeña semilla que dormía su profundo sueño. Al terminar su búsqueda exploratoria y saciar su hambre el bello pájaro continuó su viaje. Por haber estado volando muchos kilometros nuestro gran volador, por instinto de su propia naturaleza, se posó en un imenso río que encontró por el camino para saciar su sed y a la vez relajadamente hacer sus necesidades primarias. Después de algún tiempo de descanso continuó su viaje y la pequeña semilla siguió su destino fluyendo en el cauce del río. Río abajo, ya en el valle, había un pequeño rincón con pocos moradores que vivían en sus cabañas alimentándose de las riquezas del río, utilizando sus aguas para regar sus plantaciones. Entre los moradores que allí vivían se encontraba una bella mujer de mediana edad que transmitía con su presencia algo particular debido a su seneridad y sonrisa. Esta hermosa mujer con su ánfora dorada solía ir al río por las mañanas casi antes de que el sol emitiera sus primeros rayos de luz, y recogía agua para cuidar de su precioso jardín que contenía muchos frutales. Cierto día, al ir al jardín se dió cuenta que una pequeña planta de color verde intenso y brillante hacía notar su presencia entre todos los frutales que allí existían. La pequeña semilla había despertado y empezaba a cumplir su destino y realizar su sueño. Era un tipo de planta que llamaba la atención por no ser nada común en esta zona. Por este motivo la hermosa mujer decidío cuidarla, al intuir que podría ser de una especie de mucho valor para su entorno. Sus raices empezaban a ganar fuerza, sus ramas empezaron a extenderse y sus hojas empezaron a ganar un nuevo color; un lila de una belleza poco usual. Sus frutos dejaban en los paladares de la gente un gusto y un frescor que impregnaba los cuerpos de los que tenían el previlegio de probarlo. Este árbol fue creciendo y se tranformó en una gigantesca copa que servía de descano para los pocos habitantes de aquél pequeño ricón. La fama del árbol de color lila se fue extendiendo por toda la región y muchos fueron los viajeros que utilizaban aquella ruta para disfrutar de los beneficios y descansar después de un largo viaje, bajo la sombra de su copa. Cuentan los viajeros que junto a su copa se posaba siempre al atardecer un bello pájaro con los colores del arco iris que entonaba los más bellos trinos de alegria por haber encontrado su rincón y no tener que hacer más viajes largos para encontrar alimento y el descanso que necesitaba. Fue allí en este rincón donde aquella bella mujer, con su sonrisa cautivadora y con el corazón abierto, recibía a la gente que quería conocer el secreto de aquél maravillo árbol. En poco tiempo descubrieron el secreto de su nombre; el arból del color lila se llamaba SAMSARA. ¡VIAJEROS! BIENVENIDOS A SAMSARA. De la semilla al despertar el potencial que llevas dentro.
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